Vecinos de barrio desde el día uno, desde que Boca se fundó en 1905, tan sólo un año después que el Guapo. Rivales en los comienzos del siglo pasado, enfrentamientos que volvieron a latir en los últimos años.
Si bien no coincidieron en los primeros años de Barracas en Primera División -debido a estar en ligas separadas producto del cisma de 1919-, más adelante sí se vieron las caras los equipos vecinos separados por 30 cuadras, con total claridad para el Xeneize.
El historial general arroja una diferencia importante para los de La Boca, que supieron ganar hasta el momento los 8 partidos en la historia. De esos cotejos, el primero fue en el estadio antiguo de Boca, en Brandsen y Del Crucero -donde hoy se emplaza el actual-, con derrota barraqueña 4-0. Con presencia en cancha de Huracán en los primeros años en la élite, el Guapo recibió por primera vez en su historia al Xeneize en 1928, en el Palacio Ducó, donde cayó goleado 6-0. De hecho, hay tres jugadores rojiblancos que supieron jugar la totalidad de los encuentros ante Boca en su época: Raúl Estevarena jugó los cuatro del siglo XX, mientras que Facundo Mater e Iván Tapia hicieron lo propio en el XXI.
Sin embargo, el hecho que marcará la historia fue hace un año y medio: Barracas, ya por Liga Profesional, acobijó a Boca en Olavarría y Luna, en un evento histórico para el Club y el barrio. Boca se despachó con un 3-0, pero la alegría de recibir a uno de los grandes fue inmensa.
En el reducto actual, Barracas jugará por quinta vez en su historia: dos derrotas ante Boca, una en 1945 ante Temperley donde ejerció la localía y una victoria, ante Quilmes por 1-0, en el mismo año. Hasta el día de hoy, Vicente Ardura es el único futbolista del Guapo que supo marcar en la actual Bombonera.
Y si de goles hablamos, solamente tres jugadores pudieron marcarle en la historia: el último fue Maximiliano Puig, por Copa Argentina, mientras que anteriormente habían sido Neri Bandiera -en cancha de All Boys- y Prudencio Lamazou, en 1930.
Barracas quiere hacer historia esta tarde, quiere cortar muchas rachas en contra y seguir creciendo en la propia historia. Hoy es el día.